Divina, iconógrafa de la diaria lotería guadalupana y sus anexos. A través de sus imágenes, los dichos y diretes discurren en una líquida literalidad. ¡Chúpale pichón! ¡Háblenle al chile! Un humor que te pone patas arriba las palabras y sus cosas: las planchas, las cucharas, la licuadora y los tacones, cientos de tacones y suelas haciéndonos la vida de cuadritos. ¡Los martinis! Expresiones cuadrículadas y fosilizadas del habla coti-diaria reinventadas en las ilustraciones de
Divina; un mundo donde las cosas quieren decir, y dicen, lo que las palabras apenas.
Divina, iconógrafa de la diaria lotería guadalupana y sus anexos. A través de sus imágenes, los dichos y diretes discurren en una líquida literalidad. ¡Chúpale pichón! ¡Háblenle al chile! Un humor que te pone patas arriba las palabras y sus cosas: las planchas, las cucharas, la licuadora y los tacones, cientos de tacones y suelas haciéndonos la vida de cuadritos. ¡Los martinis! Expresiones cuadrículadas y fosilizadas del habla coti-diaria reinventadas en las ilustraciones de Divina; un mundo donde las cosas quieren decir, y dicen, lo que las palabras apenas.
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